El valor económico del tiempo es algo que debemos tener muy claro.

El valor del tiempo siempre será aquel que tú le otorgues. El tiempo es un elemento individual e intransferible. Si te paras a pensar, todos disponemos del mismo tiempo, lo que cambia son las tareas que llevamos a cabo con él.
Un standard del uso del tiempo nos permite separar un día, 24horas en dos grandes bloques: El tiempo personal con la jornada laboral. Un buen uso de estos dos grandes bloques nos lleva a aquello que parece hoy en día parece poco probable: la conciliación familiar/laboral.

El valor emocional del tiempo es el concepto que engloba todo aquello que nos hace felices y nos hace vibrar, tiempo que nos dedicamos a nosotros mismos o a nuestra vida familiar.

Por otro lado, el valor económico del tiempo, de nuestro tiempo, no siempre lo marcamos nosotros, sino que viene dado por las empresas según cargos, roles, expertise…

La clave es que exista un equilibrio entre el valor emocional y el valor económico del tiempo. Si tenemos la suerte de trabajar en lo que es nuestro hobbie, los dos tiempos disponen del mismo valor, pues, el valor tiempo emocional como el tiempo económico se fusionan. Es ese momento en el que la frase “por fín he llegado a casa” pierde su valor.

Los freelance o autónomos seguramente sabrán exactamente a qué nos referimos. Al ellos ser sus propios jefes han tenido que marcar un precio por su tiempo. Un precio por lo que ellos consideran que cuesta su tiempo contrarrestado con el valor del tiempo/tarea en el mercado. No es tarea fácil.

Cada sector dispone de unas tarifas y un modo de valorar el tiempo. Ya sea por tarea o por hora. Pregunta en círculos específicos de tu sector cuales son las tarifas habituales. Olvídate de que preguntar te va a hacer parecer menos profesional, no es cierto.

Dependiendo de tu valor emocional del tiempo y tus necesidades económicas, seguramente te será muy sencillo determinar un valor mínimo que percibir por cada hora empleada de tu tiempo.

Si equilibras el valor de precio de mercado con tus aspiraciones económicas partiendo del mínimo marcado. Voilá… ya tienes tu estimación por hora.

1- Encajas perfectamente con las peticiones del cliente
2- Tienes buenas referencias
3- Tienes más formación de la necesaria

Una vez sabes el valor de tu tiempo, también sabes lo que cuesta perderlo. Así que no dejes que se escape, porque como hemos dicho, el tiempo es personal e intransferible. Te recomendamos controlarlo. Asignar tiempo a tareas y llevar un control, ya sea por tareas o por clientes. Hay aplicaciones móviles como Intratime que por un precio económico te ayudan a llevar un control horario laboral. Te servirá a ti para ser más rentable y además te permitirá realizar informes para facturar y que tus clientes sepan el tiempo dedicado a su empresa.